SOMBRAS

Quiero, liberarme de la sombra
que me sigue, me envuelve,
Me persigue, me devora me tortura
cuando mis ojos las buscan de nuevo,
y no la encuentro.
Desaparece la sombra por momentos,
en el azul horizonte del desierto, levanté
mis ojos al cielo, y miré en el esquema
del universo, la sombra embrionaria
de la muerte, como un astro mágico
que resplandece, en la noche y palidece
en la aurora, internándose en la esencia
cósmica de la atmósfera.
Desapareció en el sol gigantesco de la noche,
donde la sombra se enterró en el espacio
como un relámpago, rayonante.
esfumándose la sombra que me seguía como
fantasma en el camino blanco del laberinto
del espacio.
Ésa, era mi sombra, que esa noche salió
De mi cuerpo a explorar los astros de oro, que esconde
el universo donde el sol siempre brilla y no existe
noche, porque no existen sombras que oculten
a la muerte, en la inmortalidad del espíritu viviente.

Jacintrhe Mejía Ayerdis -Nicaragua/Canadá-