Definitivo, definitivamente
estamos hechos para ver a Dios.
Dios está aquí y ahora.
Dios, ¡oh, Dios!, jamás,
jamás nunca jamás, deja de estar.
Dios es siempre y por siempre
absoluta y rotunda presencia.
Sí, hechos, estamos hechos
para ver a Dios y, sin embargo,
extrema paradoja extrema,
no lo solemos ver
por más que Dios, ¡oh, Dios!,
continuamente esté, aquí y ahora,
presente, transparente y enfrente
de nuestros ciegos ojos.
JUAN CERVERA SANCHIS-México-
sábado, 10 de marzo de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario