sábado, 17 de marzo de 2018

UNA SIRENA


Parecía una sirena,
de piel morena,
de gran melena,
no pronunciaba vocablo,
como un hechizo del diablo.

Era sonriente,
amable con la gente,
y siempre transmitía,
buena sintonía.

No se sabía de donde era,
si nacional o extranjera,
pero lo que quedaba claro,
que había algo en ella,
un poco raro.

Escribía en papel,
en la arena,
era una chica fiel,
de mirada serena.

Siempre se le veía en el mar,
como si se dedicase a mendigar,
pero solo daba tristes paseos,
en busca de algo,
que le sirviera de recreo,
pues nadie la entendía,
desde la primera luz del día.

Alguien la quiso conocer,
de ella, algo saber,
un hombre le hizo escribir,
para empezar a descubrir.

Se llamaba Estrella,
y pardiez, que era bella,
pero no oyó ningún sonido
al acercar su oído
a unos carnosos labios,
que el acto era temerario,
pero ese personaje, no le temía,
pues era doctor todo el día.

Solo vio una triste mirada,
que no le decía nada,
solo unos ojos negros y llorosos,
por males amorosos,
pero para ello, no tenía cura,
e ir con tacto, lo procura,
no le haga mas daño
del que le han hecho,
pues no la sacaría
de su lecho.

JAUME ALEGRE LASTERRA -Barcelona-

No hay comentarios:

Publicar un comentario