A cada caricia, correspondía con un:Te amo
y me seguiste la corriente, como río a su cauce
¡Cómo te habrás carcajeado!
de mi te has burlado.
Mientras yo, edificaba un mundo para ti;
tú, con otra me traicionabas,
mi vida dispuse en tus manos;
y mi dignidad pisoteabas.
¡Que ilusa fui!
la historia se ha vuelto a repetir,
¿Cómo es que creí en ti?
cuándo la herida lloraba.
¡Y te dije te amo!
¡Me marché con el dolor entre mis manos!
con la llaga supurando tu traición;
obsequiándote la más helada madrugada
Noelia Arreigue -México-
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