jueves, 25 de agosto de 2016

ME HERISTE Y POR AHÍ SALISTE


Tu rostro ya no me persigue
tus recuerdos he perdido
esos momentos que hablaban de ti se han ido, no puedo recordar...
Tus gustos, tus gestos
ni el fondo de tu mirada
donde me sumergí tratando
de verte enamorada.

Olvidé tus caricias, tus manos
y hasta el roce de tu piel.
En mi boca dejaste secos
algunos besos mas no recuerdo si tenían algún sabor.

Ya no sé cuál es tu estrella...
El cielo tiene otro color
pausado entre copas
mi corazón entendió
que ya no eres dueña de mi vida.

¡Confieso que creí morir con tu ausencia...
Mi mundo habías acabado!

Primero te lloré y rogué
supliqué y me humillé
pero tu altivez
me hizo comprender
fueron tantas las veces que repetí
que no me pasaba nada
hasta que en verdad
ya no pasa nada.

Esta mañana me ha sorprendido una flor, un bello pensamiento
que iluminó mi vida
en un momento.
Precisamente en su belleza entendí tu torpeza.

Te deslumbró el lujo y la apariencia sin tener conciencia del dolor que traería tu ausencia.

¡Los vientos del amor
me exigieron una explicación
y no supe dar una razón!.
Desgarraste sin reparo a mi corazón que se ha librado de lo que habías dejado.
Pero ha sanado sin ninguna cicatriz.

Aprende que no hay lugar para amores de paso,
no hay rincón de refugio
cuando te dan el portazo.

Hoy mi corazón late por una nueva ilusión, ilusión que trae ritmo de pasión...
Una pasión que nunca despertaste en este hombre que te amó sin reservas, ni condición.

NAZÍRA 

No hay comentarios:

Publicar un comentario