Quiero escribir para ti
palabras que no te han dicho,
y que no ponga entredicho
lo que haces vivir en mí.
Desde el día en que te vi
por tu amor he sido preso,
sin sonrojos te confieso
tu bella imagen me ata,
al verte, en mi se desata
deseos de darte un beso.
Tu eres mi ninfa hermosa
o mi Náyades divina,
que mi alma desatina
volviéndola primorosa,
de manera candorosa
tu bella imagen hechiza,
a este mortal que precisa
tenerte siempre a mi lado,
porque yo estoy atado
a la doncella de Artemisa.
Eres mi rayo de luna
que entra por mi ventana,
eres el sol de mañana
zafiro de mi fortuna,
en el desierto mi duna
donde corre fresca briza,
de mi alegría la risa
que te hace embellecer,
eres sin dudas mujer
la que mi llama atiza.
ROBERTO BATISTA PARGAS -Cuba-
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