miércoles, 14 de marzo de 2012

TORRES DE ACERO

Con las primeras columnas de humo llegó la excitación. Miríadas de personas se agolpaban en torno a la meta, apostados en balcones, postes, terrazas y pequeñas atalayas creadas ex profeso; ondeaban sus sombreros y gritaban llenos de júbilo. Frente a todos ellos, naciendo de bosques y montañas, se extendía la Gran Planicie con sus más de diez kilómetros de llanura virgen, tocada sólo por los relucientes rieles de acero.
Era la última etapa; compañías e inversores ya nada tenían que decir, sólo importaban los pilotos y sus máquinas. Ingenieros y obreros habían estado trabajando durante meses para aquel preciso momento, perfeccionando las calderas de alta compresión capaces de mantener el éutopo: el punto exacto de presión que permite a aquellas maravillas de 500 toneladas volar completamente libres sobre las vías.
De entre la vegetación surgió el brillo dorado del liviano y estilizado Liberté, seguido de cerca por el monumental Preuβevorsmarch y las bocanadas de humo de un maltrecho Osmanli Ati manteniendo la posición. Tras ellos, el flamante Royal Earthship guardaba las distancias; su piloto luchaba con válvulas y reguladores reteniendo la presión hasta que llegara el momento oportuno.
Entonces ocurrió, las tres primeras gargantas mecánicas emitieron su rugido y se deslizaron como balas sobre los rieles. El Liberté, intentando mantenerse en cabeza a toda costa, comenzó a trastabillar, momento que aprovechó el Preuβevorsmarch para acelerar aún más pese a que un extraño chirrido surgía de su interior, mitigado por el terrible estruendo del estallido del Osmanli Ati.
Sólo entonces el piloto del Royal Earthship cerró válvulas, esperó la llegada del éutopo y, tres segundos después, accionó la palanca. Un bramido de ecos metálicos inundó la llanura eclipsando el resto de sonidos. Cuando aquel titán de acero comenzó a devorar las líneas argénteas, dejando atrás a sus hermanos, el público enmudeció. Un clamor contenido estalló en el momento de ver al titán traspasar la línea de meta.

Jor Tremeche–seud.- (España)
Publicado en la revista digital Minatura 116

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