LA PALABRA

La palabra con su peso de siglos
despertando en orígenes inciertos.
Fundamento de verdades y oprobios
su decir cotidiano.
La palabra que estrujo y que engalano,
que se engarza en metales lisonjeros
y se eleva en pedestales
para fundar imperios con su ingenio.
Allí donde la telaraña de sus ritos
envuelve las ideas y los signos
enarbola su bandera y su universo
de expresión y poder, de luz y sombras.
La redimo, la arranco, la hipoteco.
Me destruye, me ensalza, me libera
y es un puente de amor comprometido
y una oración caída en el camino.
La palabra que es perdón y es juramento,
que me arrastra con sus cantos de sirena,
que funda la amistad o la condena
y es la paz caminando en los abismos.
Es dolor y tormento su costado
más sus márgenes abarcan la ternura.
La exprimo en los altares.
levanto catedrales con sus verbos
y la obligo a reinar en los silencios.
Me desarma, me templa, me enaltece.
Es un rezo y un grito, compitiendo.
La palabra... Me cobijo a sus pies
¡y la cimento!

ELIDA GRACIELA FARINI-Argentina-