sábado, 10 de marzo de 2012

INAUGURACIÓN DE LA III EXPOSICIÓN LA MUJER Y LAS ARTES ABRAZOS


En una sala llena de público y con los cuadros tapados con un velo negro se inició la inauguración con unas palabras de la presidenta del Colectivo Conileño de Artistas, Milagros Pascual Izquierdo agradeciendo a las autoridades su presencia y a los pintores y pintoras el esfuerzo realizado durante tres meses para que esta exposición se hiciese realidad. A continuación José Luis Rubio agradeció la presencia de los asistentes al acto y leyó el texto que sigue a continuación. Terminó la presentación la concejala de la mujer Natalia Robles Mures con unas palabras. Después entregó a todos los artitas participantes un obsequio. Tras las palabras cada artista descubrió el velo negro que cubría su cuadro.

ABRAZOS

Este año, los pintores del Colectivo Conileño de Artistas, en la exposición La Mujer y las Artes, desnudan sus almas, deseando que sea una gran fiesta llena de abrazos donde nos encontremos, mujeres y hombres, en la alegría, con otras personas poniendo al descubierto nuestros sentimientos, nuestros miedos, acercando nuestros corazones, libres de ataduras, a los corazones de las personas abrazadas para sentir la intensidad de nuestros latidos, el calor de nuestros cuerpos.

Unos abrazos entregados a otros, en forma de cuadros, en negro, grises y blancos, esperando que el visitante nos entregue los suyos en forma de atentas miradas.

Necesitamos esas miradas que abrazan porque necesitamos toda la ternura del espectador ya que en el abrazo de nuestros cuadros hemos desnudado nuestros sentimientos, con mucho, mucho amor.

ABRÁZAME

Abrázame despacio,
muy despacio,
para que sintamos juntos
la alegre pasión del arte
que nos envuelve con sus colores,
blancos, negros y grises,
con sus emocionantes palabras,
graves, llanas o esdrújulas.

Abrázame y siente
conmigo el alborozo
de nuestros corazones
ante la grandeza
de la pintura y la poesía.

Abrázame que así
no me sentiré solo
porque los brazos
me dirán que estás a mi lado
gozando conmigo,
haciendo tuyos mis triunfos
y también mis fracasos.

Abrázame que necesito
el calor de tus brazos
para seguir pintando
imágenes, blancas, grises o negras,
en un blanco lienzo,
y palabras agudas, graves o esdrújulas,
en un blanco papel.

JOSÉ LUIS RUBIO

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